Cuando escuchamos a nuestra vocación


"Abandono padre, madre, esposa y hermano cuando mi genio me llama. Yo escribiría sobre el dintel de la puerta: Capricho. Creo que en esto hay algo más que capricho; pero no podemos perder el tiempo en explicaciones." Ralph Waldo Emerson

En la mitología romana existe el concepto de geniī o genio que corresponde a la expresión individual de una naturaleza divina que habita en cada lugar, en cada cosa y en cada uno de nosotros. 

De este genio venía la inspiración que nos lleva a expresar nuestra individualidad por medio del arte, el trabajo, el deporte, etc. En una encantadora charla, la escritora estadounidense Elizabeth Gilbert  describe la manera cómo podemos crear una relación  sana con nuestro genio creativo. Gilbert sugiere que nos conviene alejarnos de la visión romántica del artista torturado, y considerar que nuestros momentos de brillantez se derivan más del trabajo duro y disciplinado, que de la manía autodestructiva que quiere pasar por sacrificio. 

Nuestros hábitos deben tener un carácter casi ritual porque estamos tratando de crear las condiciones propicias para que el genio -la voz de nuestra intuición- se manifieste. Estos momentos de inspiración, momentos de flow, tienen implicaciones biológicas medibles. En dichos estados entramos en una hipofrontalidad transitoria que inhibe la voz crítica, lo cual nos permite desempeñarnos de manera óptima. Nuestro sentido del yo desaparece y nos convertimos en uno con lo que estamos haciendo. 

Los estudios sobre la felicidad de Mihaly Csikszentmihalyi señalan que las personas que experimentan con mayor frecuencia estados de flow, tienen niveles de bienestar más altos que se correlacionan con la satisfacción a nivel personal y profesional. De esta manera, el responder a este llamado interior es justamente lo que nos posibilita tener relaciones más cercanas y significativas. Beber del flow, escuchar al genio, seguir a la intuición, etc, todo esto lo podemos conceptualizar como el alimento que necesita el alma. 

Alimentémonos.   

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